Cada ser vivo que habita en el planeta tiene un roll fundamental en la cadena alimenticia y en el ambiente como tal, a veces  incluso sin importar su tamaño, peso o inteligencia. Todos tienen un papel importante en los ecosistemas, por ende si alguno se extingue, provoca grandes alteraciones en la vida del habitad perteneciente, y aunque las personas no lo vean con facilidad, el cambio es permanente.

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Es el caso del abejorro (Bombus affinis) proveniente de EEUU que desde 2013, grupos de ecologistas solicitaron su entrada a la lista de animales en peligro de extinción, ya que su población en Norteamérica se ha reducido en un 87% a finales de los años 1990. Entre sus causas que provocan su pérdida están: la agricultura intensiva, las enfermedades, los pesticidas y el cambio climático. De las 47 especies de abejorros nativos de Canadá y Estados Unidos, el 25% incluyendo al abejorro Bombus affini se enfrentan a un riesgo de extinción.

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Al igual que otras especies de abejas, el Bombus affinis mantiene un gran importancia a la hora de polinizar las plantas, además de ayudar  cercas de un tercio de todos los cultivos estadounidenses.  “Los polinizadores son partes pequeñas, pero poderosas partes del mecanismo natural que nos sostiene y sostiene a nuestro mundo”, “Sin ellos, nuestros bosques, parques, prados y matorrales y la vida vibrante que sostienen, no pueden sobrevivir y nuestras cosechas requieren costosa y laboriosa polinización manual”. Dijo Tom Melius, director regional del servicio para la región central a Associated Press. Además Melius comento lo crucial que es actuar con rapidez ante esta situación antes de que el abejorro se extinga.

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La inclusión en la ley de Especies en Peligro de Extinción es evitar y restringir aquellas actividades que  causen daño a la especie en particular además de buscar su recuperación, su conservación y cuidado.